Las personas nos marcan. A veces son capaces de dejarnos un
poso que, para bien o para mal, nos
durará toda la vida. No hay nada más bello que admirar a alguien, y aunque los
años y la distancia hayan hecho que se perdiese el contacto, tenerla presente en nuestro corazón como
alguien importante para nosotros, referencia de nuestras relaciones futuras. No
importa lo breve que haya sido la experiencia, no importan las palabras dichas.
Se almacena en el corazón y no se olvida jamás.
Un profesor, un amigo verdadero, un hermano, una pareja, un
compañero… en cualquiera de sus formas posibles. Las relaciones humanas,
complejas y llenas de entresijos. De ambiciones, de intereses, de sentimientos
y de pasiones. Las amistades, los amores, los odios, las envidias… Bueno y
malo. Blanco y negro. Pero dentro de todas esas intrigas hay algo más.
Hay lazos que no se
pueden romper, que están más allá de guardar las apariencias. Es cuando somos
nosotros mismos sin tapujos, sin vergüenzas, sin mentiras delante de la otra
persona. Cuando amamos la imperfección del otro por como es.
Cuando encontramos ese ‘’algo’’. Ese ‘’otro’’ en cualquiera
de sus formas, ¿cómo olvidarlo? Nos marca y nos llena de gloria o nos cubre la piel con cicatrices.
Lamento la tardanza mis queridos lectores. Feliz verano para todos, Os actualizo la lista de canciones. Gracias por vuestras visitas.Paula.
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