sábado, 26 de octubre de 2013

SUNSHINE

El sabor de la vida. Dulce por los momentos tiernos, amarga y ácida cuando nos pone ante los obstáculos, salada por las risas y los buenos momentos que no tienen precio.
Una voz, una mirada, una sonrisa, una sensación… pueden contener todo por lo que vale la pena la vida. Cada momento es el último y no hay vuelta atrás, por ello cada instante tiene un valor incalculable.
Ayer cada vez más lejano y mañana más cercano. Me hace querer sentir con más intensidad cada instante, valorar todo lo que tengo y sentirme afortunada por ello. Ser capaz de ver las flores de mi alrededor y no un borrón sin color. Captar el viento zarandear cada hoja, la alegría y la belleza que ha esculpido cada pétalo. Ser capaz de detenerme y observar mi alrededor. Quiero capturar cada detalle y que no se me escapen.
No hay nada más doloroso que el agrio sabor de la despedida. Cuando somos conscientes de que ese momento va a acabar y que lo recordaremos en el futuro. Observamos entonces a cámara lenta y sentimos un aleteo nostálgico en nuestro estómago. Sabemos que ese instante formará parte de uno de los lugares, personas, sueños, o momentos mágicos de nuestra memoria. 

¡Queridos lectores! Aquí una semana más os dejo una entrada y la letra de la primera canción que suena. Muchos besos a todos. Paula.

AIN'T NO SUNSHINE - BILL WITHERS

Ain't no sunshine when she's gone. 
It's not warm when she's away. 
Ain't no sunshine when she's gone 
And she's always gone too long anytime she goes away. 

Wonder this time where she's gone, 
Wonder if she's gone to stay 
Ain't no sunshine when she's gone 
And this house just ain't no home anytime she goes away. 

And I know, I know, I know, I know, I know, 
I know, I know, I know, I know, I know, I know, I know, 
I know, I know, I know, I know, I know, I know, 
I know, I know, I know, I know, I know, I know, I know, I know 

Hey, I ought to leave the young thing alone, 
But ain't no sunshine when she's gone, only darkness everyday.
Ain't no sunshine when she's gone, 
And this house just ain't no home anytime she goes away. 

martes, 15 de octubre de 2013

PASSION

Protagonistas de nuestras vidas. Abrimos nuestros párpados al despertar y comienza la obra.
A lo largo de la vida muchas veces perdemos el rumbo, nos sentimos desorientados, no nos hemos convertido en quienes creíamos ser. La función sigue igual con o sin nosotros. Los días se suceden sin emociones y sin que esperemos nada de ellos. Cierto es que la vida es aprendizaje, que cuando crecemos comprendemos que se sufre menos cuanto menos se espera de la gente y nuestro entorno. Las decepciones nos hunden.
¿Cómo vivir así, sin emociones? El ser humano funciona por incentivos, por objetivos, por ilusiones. Nada tenemos si no hay nada que esperemos, que ansiemos. El móvil del día a día, la sangre de nuestro motor. Porque no hay nada más bello que la ilusión, no hay sonrisa ni alegría más sincera. Los sueños son nuestros salvavidas. Una persona no puede ser feliz sin deseos, sin afán por que llegue algo que ansía.
La vida nos da golpes, pero hay que saber defenderse no cobijándose, sino rodeándose de lo que le hace feliz a uno. Entregarnos a nuestras pasiones, rodearnos de libros fantásticos románticos que nos aíslen de nuestro personaje que tan concienzudamente nos hemos creído. Porque nada es importante, nada es tan duro, si vivimos adorando.
La felicidad se construye, no viene sola. ¿Cómo? Cubriéndonos de lo que nos hace sentir bien. Una buena película con un mensaje que nos llegue hondo no tiene precio, la música que nos cobija y nos comprende como nadie, nuestras aficiones, nuestros gustos, nuestros secretos sobre lo que más nos gustaría ser… al fin y al cabo, haciendo aquello con lo que más disfrutamos y menos nos sentimos nosotros mismos. Donde la realidad es olvido, y donde el sueño es la realidad.

Mis queridos lectores! Retorna el blog! Con más ganas que nunca de compartir con vosotros la buena música y los pensamientos.